A partir del 8 de noviembre, ya somos 8.000 millones de personas que recibiremos el fin del año A medida que nos acercamos al fin del año 2022, la cual se nos presenta como un “Annus Horribilis”, según el dicho en latín acuñado a años con balance negativo. Con cualquier vara que se le mida, este año se recordará como un año poco satisfactorio para el desarrollo de la humanidad. Tsunamis existenciales azotaron el mundo, uno tras otro, sin permitir siquiera recuperarse de las anteriores.
Ing. Juan Szabo / News El Observador de Energía y Ambiente / 17 de noviembre de 2022
El COVID-19 y sus diferentes mutaciones, no han sido erradicados y los tratamientos utilizados están siendo cada vez más criticados. . En paralelo comenzó la crisis energética, algo relacionado con la recuperación inesperadamente rápida de las demandas energéticas.
La continuada sobrevivencia del COVID y sus mutaciones ha sido manejada en formas diametralmente diferentes, en el occidente prácticamente se le trata como un resfriado tradicional, por el contrario, en China lo han tratado con el llamado “cero tolerancia”, confinamientos masivos con paralización de actividades al punto de afectar seriamente la economía.
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